El CAVP está de luto. Nos ha dejado un amigo y leyenda del Club.
De Jorge Rubinetti pueden darse datos estadísticos que sirven para posicionarlo sin esfuerzo como una de las figuras históricas del ajedrez argentino. En estos momentos se pueden leer en todos los medios (los diarios más importantes del país, los portales más conocidos de ajedrez, los medios oficiales de las federaciones, etc.) sobre sus logros deportivos: cuatro veces Campeón Argentino Absoluto, Campéon Argentino Juvenil, múltiple representante olímpico, victorias o empates contra figuras históricas. No será difícil encontrar en este momento alguna partida ejemplar de Jorge. Y sus méritos no solo fueron como jugador: dedicado en sus últimos años a la enseñanza, también estuvo a la altura para la preparación de jugadores de elite (Quinteros, Panno!) y como entrenador olímpico ("usaba todo eso para aprender, era un intercambio")
Desde este Club lo despedimos desde otro lugar, desde el cariño y la intimidad. Lo saludan los socios que lo vieron entrar por primera vez siendo un niño curioso, lo saludan sus compañeros de anécdotas, inevitables víctimas dentro y fuera del tablero, lo saludan los que lo, como dice el tango, "de chiquilín te miraba de afuera, como a esas cosas que nunca se alcanzan..."
Formado casi de manera autodidacta, declaró "leía el libro que tenía cerca y a veces lo empezaba de atrás hacia delante, y jugaba muchísimo". Su talento no tardó en destacarse en un CAVP que no estaba exento de figuras. Con sus logros upo llevar al Club a un merecido reconocimiento a nivel nacional, y ya destacado como fugura internacional nunca se olvidó de sus orígenes. Hace poco destacó su nacimiento ajedrecístico en el Club: "... lo que me gustaba era que había mucha vida en esos clubes, yo iba no sólo a jugar sino a hacer vida social. Me hice muchos amigos allí. Ahora los jugadores van a los torneos que organizan los clubes, se sientan, juegan y se van."
Con tristeza y profundo cariño les deseamos que sigan pinponmeando con Foguelman y otros amigos en el CAVP celestial!
